EL NOVATO 1

ANTONIO BORREGUERO BORRE

18 de Noviembre de 2012.

Pretendo desde hoy y sin pretensión, contaros un poco mi experiencia desde el punto de vista de un novato en esto del ciclismo de carretera, y sobre todo como nuevo miembro del CLUB CICLISTA EL VISO.

Material:
GES
SPIUK

BH.ZAPHIRE.
Aunque ya tengo algunas anécdotas, voy a empezar a contaros desde hoy.  Ya desde ayer sabíamos que después de una noche lluviosa íbamos a tener un domingo esplendido. Así que cuando me desperté sólo miré por la ventana para ver efectivamente que no llovía. Después de equiparme y calzarme, con bici en mano, abrí mi puerta con la maldita sorpresa de que llovía y no poco. Mecachis. Corriendo fui a mirar el wasa a ver que se decía. Nada. Pareciese que habían quedado en no salir. Ya empezamos Dalmacio, Mariano, yo y Fafi a intentar saber que pasaba hoy, si se salía o no. Viendo que la cosa estaba fría, Fafi y yo quedamos por nuestra cuenta para hacer Guadajoz a las 10, ya que el Oráculo Móvil nos decía que quedaba poco de agua. Peeeeeero, a eso que la voz de la experiencia (Matías) de repente entró en el wasa y habló y sentenció: “A las 11, cuando se seque la carretera”. Joé, no había caído en eso, en que se tenía que secar la carretera. Acostumbrado a la BTT.
Total, que al final nos juntamos unos pocos para salir: Guerre, Quique, Dalmacio, Matías, Mariano, Carlos M., Lora, Fafi y yo. No se si se me olvida alguno.
Al poco de pasar la CANLA, ya ví que hoy no iba a ser un paseito relajado, hablo desde el punto de vista del novato, es decir, lo que  para mi es rápido, para vosotros es despacio. Pero bueno, ahí estuve todo el tiempo más o menos decentemente. En alguna cuestecilla me rezagaba un poco, pero sin mucho esfuerzo conseguía reengancharme. También me daba cuenta que alguna cabecita se volvía para atrás y bajaba un poco el ritmo al final de esos repechos para que yo no me descolgara.
Antes de llegar a la última rotonda para girar para Guadajoz, viendo que era un ritmo muy fuerte para mi y que mis fuerzas ya empezaban a menguar, aprovechando una pequeña bajada me adelante hasta Mariano, que era el que iba primero en ese momento, para rogarle que aflojara un poco para que yo pudiera reponerme. Así cuando llegamos a la rotonda se paró un poco. Momento que aproveché para beber agua y relajarme.
Ya en Guadajoz, antes de empezar la carretera que nos lleva a Carmona, sabedor de que es una carretera que pica para arriba y que yo no iba sobrado, avisé: “Bueno señores, ahora si me desengancho, no esperarme. Seguid para adelante que voy a ir a mi ritmo”. Y efectivamente, nada más girar para coger dicha carretera vi que se me iban y que sólo podría aguantarlos un par de kilómetros si al caso. Durante unos momentos me di cuenta que el bueno de Matías hizo amago de esperarme y yo para mis adentros le decía: “sigue, sigue, no me esperes”. Hasta que decidió tirar para adelante y dejarme atrás, cosa que no sabe él cuanto agradecí. Porque a partir de ese momento me relajé enormemente y disfruté de un agradable camino hacia Carmona con un sol brillante y un cielo totalmente despejado. No iba quemado, iba a 26 km/h, pero necesitaba recuperar pulso para poder llegar al Viso.
Poco a poco vi como se alejaban y en algun momento pensé “coño, ¿tan mal estoy?” y es que parece ser que Carlos propuso apretar los machos y tirar a todo carajo para que sirviera el día de algo de entrenamiento. Llegué incluso a perderlos de vista. Cuando calculé que podrían estar llegando a Carmona o incluso haber llegado ya, llamé a Matías para que no se preocuparan de mi y decirles que iba bien, que no iba apajarao y que siguieran hacia delante sin esperarme. A lo que él me dio el OK. Cual fue mi sorpresa cuando veo que venía en busca mía. Después de aseverarle por haberse vuelto, me dijo que me estaba esperando y que de todas formas SIEMPRE SE ESPERA A LA GENTE cuando se llegaba a Carmona. Y es que, todo novato tiene cabida en este Club,  por algo  va a cumplir 25 años. Con lo que todo novato es arropado y considerado para integrarlo en el grupo. Así que, a decir verdad agradecido por el compañerismo, dimos comienzo después de arreglar un pinchazo de mi Protector, la vuelta hacia el Viso, ya más relajado todo el mundo y en conversación. Con final de etapa en Lilitos y echando atrás un día más de disfrute, deporte y risas. Me llamó la atención la buena forma de Quique después de estar un tiempo en el dique seco y lo bien que se ha adaptado otro novato pero más fuerte que un toro, el Lora.


Así lo ha vivido y así lo ha contado, el novato del supermercado.
Bye bye!





0 comentarios :

Publicar un comentario

únete a nuestro club en STRAVA.